Sobrevivir al ébola en Sierra Leona entre los años 2014 y 2016 no era suficiente victoria. Las más de 10.000 personas que consiguieron superar la enfermedad en el país tuvieron que enfrentarse a las ausencias de amigos, familiares, vecinos… Y al estigma de la enfermedad. Sin trabajo, sin relaciones sociales, muertos en vida por haber conseguido no fallecer por el ébola.
Erison Turay sobrevivió al ébola y perdió a 38 miembros de su familia en el brote que mató a cerca de 4.000 personas en Sierra Leona. Sin aspiraciones a encontrar trabajo y sufriendo el aislamiento social por haber sido un enfermo, decidió que tenía que hacer algo por todas esas personas que, como él, habían superado la enfermedad.
Gran aficionado al fútbol, encontró en él una respuesta a qué hacer con su tiempo libre; y, sobre todo, a ofrecer una salida a los que, como él, habían conseguido vencer al virus. Porque, ¿quién iba a jugar con sobrevivientes de ébola? Así nació el Kenema Ebola Survivors FC, un equipo dedicado a fomentar la integración de aquellas personas que habían superado el brote, con sección masculina y femenina.
Entrenar dos veces a la semana, recuperar hábitos, distraerse fueron terapias importantes para los supervivientes que se enfrentaban al estrés postraumático de haber superado la enfermedad y haber perdido a muchos seres queridos. El trabajo del Kenema Ebola Survivors FC fue mucho más allá de ser un mero club de fútbol.
Pero, ¿contra quién jugaban? Nadie quería participar en un partido contra estigmatizados y no tenía sentido formar parte de un equipo sin poder disputar un solo partido. Así que fue necesario que se formara otro equipo de fútbol, The Ebola Figthers, compuesto por el personal médico masculino y femenino que les atendió durante el brote.
Más de 2.000 personas asistieron en mayo de 2015 a los partidos entre las secciones femenina y masculina de Kenema Ebola Survivors FC y The Ebola Figthers. No importa el resultado. Terminaron los partidos y se abrazaron. Erison Turay y el resto de su equipo sintieron de nuevo el cariño, volvieron a sentirse personas.
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